El sangrado de implantación es uno de los primeros síntomas de embarazo aunque muchas mujeres no se dan cuenta de lo que es, ya que puede ser fácilmente confundido con la regla. ¿Te gustaría saber más al respecto?
¿Qué es el sangrado de implantación?
Si estás buscando concebir, seguramente sabes tomar tu temperatura basal, corroborar el estado de tu cérvix y calcular tus días fértiles. Es probable que también hayas averiguado cuáles son los primeros síntomas de embarazo, y entre ellos destaca el sangrado de implantación porque es, cuanto menos, curioso.
¿Cómo puede ser que se produzca un sangrado si se produce la fecundación? Este sangrado se produce justamente como resultado de la fecundación, aun cuando pueda confundirse con el sangrado que se genera cuando el óvulo no recibe ningún espermatozoide. Veámoslo todo en profundidad.
A finales del ciclo menstrual, el óvulo baja desde la Trompa de Falopio hasta el útero que durante todo el ciclo se ha preparado para recibir al óvulo fecundado. En caso de no producirse la concepción, el revestimiento del útero baja por la vagina en forma de sangre, generando la regla.
Ahora bien, si el óvulo ha sido fecundado, el mismo anida en la pared uterina y, así, puede producirse un leve sangrado que podría llegar a confundirse con el manchado del primer día de la menstruación, ya que se produce exactamente entre 10 y 14 días después de la fertilización.
Características del sangrado de implantación
Como ya te hemos comentado, suele producirse entre los 10 y los 14 días posteriores a la fecundación; es decir que coincidiría con la fecha probable de la regla (1). Por eso, muchas mujeres pueden confundirlo, sobre todo si tiene reglas livianas y poco abundantes.
Cabe destacar que no todas las mujeres experimentamos el sangrado de implantación. En muchos casos, la implantación en la pared uterina no tiene síntomas, mientras que en otros se produce este leve sangrado o, incluso, un muy leve manchado.
Eso sí, a diferencia de la regla el sangrado de implantación se ve más rosado o amarronado, dependiendo el caso, y, en algunos casos, suele estar acompañado de calambres aunque bastante más leves que los típicos del síndrome premenstrual.
No obstante, el dolor de cabeza, de senos y los cambios de humor también pueden hacerse presentes, haciendo más complejo distinguir un sangrado de otro.
En conclusión, ¡es muy fácil que pienses que ha llegado la regla cuando, en realidad, tu bebé está en camino!
¿Cómo distinguir el sangrado de implantación de la regla?
Distinguir la regla del sangrado de implantación es bastante complejo, pero en líneas generales, ten en cuenta lo siguiente (2):
- El sangrado de la regla suele ser rojo y brillante, sobre todo al inicio del ciclo, mientras que el de implantación es más descolorido, tendiendo al rosa claro o al marrón.
- Durante la regla, es normal que pierdas pequeños coágulos al deshacerse el revestimiento uterino. El sangrado de implantación se reconoce por la pérdida (pequeña) de sangre.
- El sangrado asociado con la implantación del óvulo fecundado es breve pudiendo ir desde un par de horas hasta un máximo de tres días aunque sin grandes pérdidas de sangre. La regla, por su parte, dura varios días, entre 3 y 7 según la mujer.
- La cantidad de sangre es pequeña en el caso de la implantación y suele observarse como una mancha en la ropa interior o en el papel higiénico al limpiarse. Si te colocas una compresa y no la llenas, quizá sea hora de hacerte un test de embarazo.
- Finalmente, en el caso de la regla, el flujo menstrual aumenta el segundo día. La implantación no muestra aumento del sangrado.
¿Es necesario ir al médico?
En general, la presencia de sangrado no necesita de una consulta médica, a menos que se produzca una vez confirmado el embarazo.
Si no tienes dolores ni ninguna clase de molestia, no necesitas tener una visita con tu ginecólogo. De hecho, puede ser recomendable que esperes unos días para corroborar si el flujo aumenta, señalando que se trata del ciclo menstrual, o no.
Por supuesto, tras algunos días, si tienes la sospecha de que el manchado puede relacionarse con la implantación, puedes comprar un test de embarazo en la farmacia y realizarlo en casa.
Recuerda que es aconsejable llevar a cabo el test con la primera orina de la mañana, ya que la hormona del embarazo estará más concentrada y el test la detectará más fácilmente.
¿Significa esto que no puedes realizar el test en otro momento del día? Claro que no, puedes hacerlo cuando quieras, pero siempre tras un largo periodo sin orinar, para permitir la mayor concentración de las sustancias en la orina.
¡Cruzamos los dedos por ti! Esperamos que tu hijo esté en camino y si no es así, no te desanimes. ¡Lo estará más pronto que tarde!