Los primeros baños del bebé recién nacido generan un poco de ansiedad. Es taaaan pequeño. Para disfrutar del momento, te recomendamos que, sobretodo en los primeros baños, seáis más de uno, que vayáis sin prisa y que tengáis preparado de antemano todo lo que se pueda necesitar.
Hablemos de esos productos esenciales que te ayudarán a crear una vivencia maravillosa tanto para ti como para tu pequeño. ¿Quieres descubrirlos?
Cosas que seguro que necesitarás para bañar a tu bebé
Si bien hay cositas que pueden sustituirse por otras, en general existen algunos productos que es recomendable tener en casa para facilitar la tarea del baño. Piensa que al nacer tu bebé será muy pequeño y frágil, incluso es posible que te dé un poco de miedo bañarle y hacerle daño sin querer. Esto es bastante habitual en el caso de los padres primerizos, ¡a todos nos ha pasado! De hecho, a los padres múltiples se les olvida lo pequeño que es un recién nacido hasta que tienen otro nuevamente en brazos.
Para cuidar de tu hijo lo mejor posible y vivir la experiencia del baño sin estrés, lo mejor es que te organices de la A a la Z con todo lo necesario. Veamos qué productos forman parte de estos imprescindibles.
La bañera
Algunos padres optan por bañar al pequeño en el lavabo o, incluso, por hacerlo en la bañera apoyado en su brazo. Si bien esto es posible, lo más cómodo es hacerlo en una bañera adaptada a tu bebé. Éstas tienen las medidas de seguridad necesarias para que tu pequeño no resbale, aunque, por supuesto, nunca debes dejarle sin supervisión ¡ni siquiera para buscar algo!
Veamos juntos algunas buenas opciones de bañera según tus necesidades. En primer lugar, puedes escoger una bañera tradicional con soporte, como la Jané, o por una que incluya también cambiador como el modelo Chicco Cuddle&Bubble. La ventaja de estas opciones que pueden plegarse y achicarse un poco.
También existen opciones sin soporte, que pueden colocarse dentro de tu bañera o tu plato de ducha. Son menos aparatosas pero tienen el inconveniente que deberás agacharte para bañar a tu hijo y, la verdad, no es la posición más cómoda. No obstante, si esta es tu elección, échale una mirada al modelo Shnuggle que es ergonómico y compacto, o a la bañera plegable de Stokke, ideal para quienes viven en pisos pequeños y desean opciones fáciles de guardar.
Una opción muy práctica es la que ofrece el modelo Bubble Nest de Chicco, una bañera que se puede usar con y sin soporte y que, además, permite poner al bebé en posición acostada y sentada. Ideal para usar dentro de una ducha.
Por último, la opción más voluminosa es el mueble-bañera. Puede estar bien si tienes espacio de sobras en casa. Debes tener en cuenta que para llenar y vaciar la bañera deberás trasladar agua desde el baño hasta la habitación si es que has ubicado allí el mueble.
Termómetro de baño
Llegará un momento en el que no lo necesites porque sabrás si la temperatura está bien o no al tocar el agua, pero hasta entonces ¡debes tener un termómetro de baño! El de Tommee Tippee te permite saber la temperatura del agua y de la habitación, mientras que otros como el simpático pato de Munchkin cambia de color cuando el agua está demasiado caliente.
Champú y jabón de baño
La Dirección de Calidad del Medicamento y la Asistencia Sanitaria del Consejo de Europa (EDQM) se encarga de investigar y asegurar la seguridad de los productos que salen a la venta según las propiedades de los ingredientes que contienen sus fórmulas. Por supuesto, los productos infantiles están regulados.
A la hora de optar por un champú y jabón de baño, presta especial atención a que sea hipoalergénico. Ten en cuenta que la piel del bebé es muy delicada y esto es fundamental para cuidarla.
Suavinex, Mustela, Chicco, Weleda y el Instituto Español ofrecen opciones adaptadas para el bebé, entre muchas otras marcas.
Esponja de baño
Muchos padres optan por el uso de esponjas para el baño del bebé. Lo ideal es elegir una esponja natural y, por supuesto, cuidar muchísimo que no quede llena de agua tras el baño para evitar la proliferación de gérmenes.
Toalla o albornoz
Para retirar a tu bebé del baño y que no coja frío necesitarás una toalla o un albornoz. Particularmente, me inclino por la toalla con capucha cuando son muy pequeños porque son fáciles de colocar y no hay que preocuparse por introducir los brazos del bebé en las mangas. El albornoz me parece más práctico a partir de los 6 meses, cuando el bebé ya se sienta.
Por otra parte, las muselinas grandes también pueden usarse como toallas para retirar al bebé del baño. No obstante, ten en cuenta que no abrigan ni absorben tanto.
Aceite para bebé y/o crema hidratante
No es nada raro que la piel del bebé se reseque con el contacto con el aire y la ropa. Por este motivo, puede ser recomendable ponerle un poquitín de aceite para bebés o crema humectante. El aceite puedes, incluso, colocarlo en el agua del baño. Entre las posibilidades adaptadas para el bebé están la leche corporal de caléndula de Weleda o el aceite de caléndula de la misma marca.
Crema para el culito
Antes de poner el pañal, conviene poner un poco de crema para prevenir la dermatitis. Penaten, Bepanthen y Weleda son algunas de las marcas más usadas por los padres.
Juguetes para el baño
Los libros aptos para el baño son una excelente opción para incluir en la rutina cuando el bebé ya tiene alrededor de 3 meses. Recuerda, igualmente, que el baño debe ser corto para evitar que el pequeño coja frío.
Cuando el bebé ya se sienta, puedes comprar más juguetes para el baño, como barcos, submarinos, animales, un pulpo flotante con anillas o un bonito molino de agua. Y por supuesto no te olvides de comprar, también, un organizador de juguetes.
Un asiento de baño
Cuando el bebé ya se sienta bien, quizá desees pasarlo a un asiento de baño como el Vtech Aquasilla 2 en 1. Estos asientos tienen unas ventosas en la parte inferior que se aseguran en la bañera para evitar que el mismo vuelque. Antes de comprarlo, presta atención al ancho de tu bañera para asegurarte de que quepa bien y las ventosas puedan cumplir su función.
Ahora que ya sabes qué productos necesitas para el baño de tu bebé, relájate y disfruta del momento. ¡Te encantará descubrir las reacciones de tu hijo frente al agua, tus caricias y sus juguetes!
