10 semanas de embarazo y ¡contando! ¿Se te está pasando rápido o despacio? Seguramente, todo dependa de cómo te encuentres. Aquellas mujeres que no experimentan náuseas, suelen decir que el tiempo vuela, mientras que si estás padeciendo náuseas y vómitos, es posible que el tiempo te parezca de chicle. Pero ¡ánimos! Queda poco para el final del primer trimestre y, con él, de los malestares más típicos.
Esta semana tu hij@ continúa su frenético crecimiento. Sus órganos internos se desarrollan a una velocidad de vértigo y tu pequeño no para de moverse, aún cuando tú no eres capaz de sentirlo. ¿Quieres conocer todo lo que sucede durante la semana 10?
10 semanas de embarazo: el bebé
Faltan unas pocas semanas para que puedas volver a ver a tu hijo en la pantalla de la ecografía. En ese momento, el médico analizará su crecimiento y te contará toda clase de interesantes informaciones sobre su desarrollo. ¡No podrás evitar emocionarte!
Pero volvamos al presente. Las 10 semanas de embarazo, es decir las 8 semanas de vida de tu hijo, son un hito en el crecimiento de tu bebé. En este momento, sus órganos vitales ya se han formado y están comenzando a trabajar en conjunto. ¡Es tan pequeño pero su cuerpo funciona como una máquina perfecta!
Los médicos consideran que pasada la semana 10, el riesgo de anomalías disminuye drásticamente; por eso, ¡esta semana es un hito en la vida de tu pequeño!
A nivel externo, una de las cuestiones más importantes es la desaparición total de esa especie de cola que se podía observar al final de la columna vertebral. Además, la membrana que unía los dedos de las manos y los pies comienza a desaparecer.
Por otra parte, su cara se redondea y aparecen unas diminutas protuberancias en la boca de tu hijo: ¡son sus dientes! Por supuesto, estos no crecerán ahora sino que se formarán y esperarán al momento adecuado para salir. Sin embargo, ¿sabías que algunos recién nacidos (pocos, pero los hay) nacen con dientes? Si este es el caso de tu hijo, no te asustes porque esto no impide la lactancia materna ni dificulta la alimentación de tu bebé de ninguna manera.
Si nos referimos al desarrollo interno, en el caso de los varones se inicia la producción de la testosterona, la hormona masculina.
En general, los cartílagos acumulan calcio, un mineral necesario para convertirse en huesos. Este proceso es tan largo que culminará tras el nacimiento. Asimismo, los intestinos comienzan a ubicarse en su lugar definitivo.
Por otra parte, miles y miles de neuronas nacen cada día e impulsan el desarrollo del sistema nervioso. Aunque aún no se relacionan entre sí, este proceso es sumamente importante porque sienta las bases de las conexiones futuras.
Tu hijo realiza cada vez más movimientos que aún son involuntarios. En algunas semanas, cuando los músculos se conecten definitivamente con los nervios y estos con el cerebro, tu pequeño podrá comenzar a moverse de manera dirigida. Por el momento, abre y cierra sus manos y mueve piernas y brazos.
Hacia fines de las 10 semanas de embarazo, el feto (ya no es considerado un embrión porque ha adquirido apariencia humana) medirá entre 30 y 40 milímetros, y llegará a pesar 5-6 gramos.
10 semanas de embarazo: la madre
Algunas mujeres padecen de náuseas y vómitos, motivo por el cual aún no han ganado peso. No obstante, también es posible que al pesarte notes que tienes uno o dos kilos más que al inicio del embarazo. Esto es totalmente normal ¡y saludable!
Todo depende de cada mujer porque ¡cada una es un mundo! Si has perdido un poco de peso, tampoco te alarmes: puede ser efecto de la pérdida de apetito originada por las náuseas. Consúltalo con tu médico, pero no te preocupes.
Los síntomas de las semanas previas aún persisten… y lo harán durante algunas semanas más. Por lo general, las hormonas aún están en niveles muy altos y el cuerpo, al tratar de acostumbrarse a estas modificaciones, genera toda clase de molestias. Pero algunas mujeres comienzan a notar algunas mejorías como una disminución de las náuseas y los vómitos, de los mareos y del cansancio.
Si este no es tu caso, paciencia. Sobre la semana 12 o 13, estas molestias suelen despedirse para siempre… o hasta el próximo embarazo.
El útero continúa creciendo para hacer lugar a tu hijo. Esto puede generar pinchazos y mayores ganas de orinar. ¿Y ya hay tripita? Lo más habitual es que si eres primeriza, tu vientre aún no muestre mayores cambios, como mucho un leve abultamiento solo perceptible para ti.
En cuanto a los estudios, es posible que esta semana realices el cribado o screening bioquímico, cuya combinación con la ecografía de las 12 semanas le permitirá al médico estimar el riesgo de anomalías cromosómicas de tu bebé.
Checklist semana 10
- Realiza el cribado prescrito por el médico.
- Pide cita para la ecografía de las 12 semanas.
- Tómate las vitaminas que te indique el ginecólogo.
- Evita el alcohol y el tabaco.
- Lleva una alimentación saludable basada en frutas, verduras y alimentos ricos en fibra.
- Evita el consumo de alimentos no pasteurizados y/o crudos.
- Descansa mucho.
- No exijas demasiado a tu cuerpo.
- Bebe abundante agua.
- Comienza a investigar la ropa premamá.
- Si las náuseas, los vómitos o el estreñimiento te molestan, consulta con tu médico.
Durante el tercer mes del embarazo, los malestares comenzarán a desaparecer mientras tu tripita comienza a crecer. ¡Disfruta del desarrollo de tu bebé!
Si te lo perdiste, puedes leer aquí qué pasó en la semana 9 del embarazo. Si quieres saber qué pasará en la semana 11, echa un vistazo aquí.